Seguro que lo has escuchado en más de una ocasión: sonreír ayuda a liberarse del estrés, mejora la salud, rejuvenece y realza nuestro atractivo. ¿Pero sabías que no todas las sonrisas tienen los mismos efectos? Existe una sonrisa radiante, genuina, luminosa y muy especial: la sonrisa Duchenne.
Empecemos por lo más básico. ¿Cómo diferenciar esa sonrisa? Es esa en la que se elevan las comisuras de los labios y se abre ligeramente la boca, se entrecierran los ojos y se alzan las mejillas. Y sí, también salen esas características arrugas en el borde ocular. No solo es una sonrisa radiante, es una sonrisa sincera y espontánea, muy difícil de forzar.
¿Qué tiene de especial la sonrisa Duchenne?
Sonreímos a veces de manera forzada, para agradecer algo o mostrar apoyo. Pero la sonrisa Duchenne es esa que nace de lo más profundo de las emociones, y es ahí donde está la clave de por qué es tan especial. Fue el investigador francés Guillaume Duchenne el que estudió sus mecanismos y determinó que esta sonrisa está íntimamente ligada a la parte más antigua del cerebro, es decir, a la que se relaciona con los centros emocionales y con los procesos intelectuales.
Esa sería la explicación científica, pero en el día a día y para ti tendrá otro significado. Una sonrisa radiante y genuina tiene mayor poder que cualquier otra porque genera un mayor número de endorfinas, dopamina y serotonina. En otras palabras, te ayudará a sentirte mucho mejor, con más seguridad en ti y más relajado/a. En definitiva, más feliz.
¿Y qué tiene que ver con el intelecto? Mucho más de lo que quizá imaginabas. Una sonrisa genuina e inimitable tiene el gran poder de favorecer la plasticidad cerebral, que es la que nos permite cambiar, adaptarnos y aprender durante nuestra vida. Así que, de algún modo, esa sonrisa radiante también ayuda a mejorar las capacidades intelectuales.
Siempre notaremos los efectos beneficiosos de esa sonrisa auténtica, y también lo harán los demás. Pero, por cuestiones estéticas, a veces la escondemos o, lo que es peor, la reprimimos.
Tú también puedes tener una sonrisa radiante
Si has notado que con la edad tus dientes ya no tienen brillo o han aparecido manchas, si se han desgastado o has perdido alguna pieza, o incluso aunque nunca hayas tenido una sonrisa de anuncio, no importa, no hay motivos para que dejes de sonreír.
Hoy en día, los tratamientos de estética dental permiten corregir estos y otros muchos problemas. Y no solo eso, sino que son rápidos, muy poco invasivos y están al alcance de cualquiera. Puedes tener esa sonrisa radiante y volver a sentirte bien, a mostrar esa personalidad alegre y vitalista que te caracteriza.
Los tratamientos de blanqueamiento dental, por ejemplo, son capaces de rebajar varios tonos el color de los dientes en solo unas semanas. En caso de problemas de alineación, los tradicionales brackets han dado paso a alineadores transparentes discretos y cómodos. Y para problemas como desgaste o espacios interdentales, las carillas dentales se colocan en solo dos sesiones.
Dando un paso más allá, es posible incluso el diseño digital de sonrisas. A través de avanzados programas informáticos y estudios radiológicos se puede dar forma a una sonrisa ideal para cada persona, también para ti. Será una sonrisa que equilibre tus rasgos faciales, te haga parecer más joven y mejore tu autoestima. Esto es posible gracias a que esta técnica permite elegir desde el tono a la forma y el tamaño de carillas dentales, que serán las que crearán esa sonrisa radiante que cambiará tu vida.
Cambiando tu sonrisa no tendrás motivos para ocultarte al sonreír, pero sí los tendrás para hacerlo mucho más a menudo porque te sentirás a gusto con tu imagen. Y en Carralero Clínica Dental Avanzada te ayudamos a conseguirlo. Te ofrecemos los más innovadores tratamientos de estética dental. Tu sonrisa será nuestra recompensa. Pide cita ya en nuestra clínica dental en Xàtiva.