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Implantes cuando tengo poco hueso

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¿Puedo colocarme implantes cuando tengo poco hueso? Sí, actualmente, la falta de hueso no significa que no se puedan colocar implantes dentales. En Carralero Clínica Dental Avanzada, existen técnicas y procedimientos especiales diseñados para colocar implantes cuando tienes poco hueso y permitir la colocación de implantes en áreas con poco hueso.

Los implantes dentales son una excelente opción para reemplazar los dientes perdidos, pero existen casos donde el poco hueso en el área donde se desea colocar el implante puede complicar el procedimiento. La falta de hueso puede ser el resultado de una enfermedad periodontal, la pérdida de dientes o simplemente la anatomía de la mandíbula.

Todo ello aportando un resultado natural  y mucho más duradero, ya que el implante se integra en el hueso y no se desplaza con el tiempo.

¿Qué tratamientos me pueden ayudar para implantes dentales cuando tengo poco hueso?

Los implantes customizados son dispositivos biomédicos que se elaboran a través de la utilización de la impresión 3D y tienen como función la rehabilitación de atrofias maxilares, en casos clínicos complicados donde no permite la colocación de implantes tradicionales.

Estos implantes se convierten en soluciones que nos permiten ejecutar intervenciones de carga inmediata (dientes fijos provisionales en el mismo día). Entre estos están los implantes subperiósticos.

Son implantes que se colocan a nivel posterior del maxilar superior cuando hay una pérdida de hueso severo, pero que no está indicado un injerto óseo. Ante este contexto, se emplean los implantes pterigoideos que suponen una solución práctica, eficaz y sencilla para la rehabilitación oral del paciente.

Recientemente hemos incorporado a nuestro exclusivo abanico de tratamientos la técnica PRGF®-Endoret®. Una reciente innovación de la medicina regenerativa que permite estimular la regeneración de tejidos dañados a través de la concentración y aplicación terapéutica de factores de crecimiento y otras proteínas presentes en el plasma sanguíneo del propio paciente, lo que asegura su bioseguridad y evita riesgos de rechazo en el mismo.

Son los implantes que se usan en pacientes que sufren una atrofia en el hueso maxilar, es decir, no poseen calidad ni cantidad en dicho hueso, para soportar unos implantes dentales estándar y que tampoco son candidatos para emplear técnicas de regeneración ósea, como injertos o elevaciones de seno.