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Los años, ciertos alimentos, algunas medicinas o factores genéticos pueden provocar manchas en los dientes, el amarilleamiento o una coloración anormal. Los tratamientos dentales hoy en día garantizan la posibilidad de rebajar algunos tonos ese color. También hay productos que se pueden usar en casa y aseguran buenos resultados. Surge entonces una duda lógica. ¿Someterse a un blanqueamiento dental en clínica o probar suerte con un blanqueador comercial?
No todos los blanqueadores son iguales
La base de los productos utilizados para el blanqueamiento dental (los que están testados y autorizados para su venta) es la misma: peróxido. Lo que varía es la cantidad que hay en las soluciones.
En el caso de las que se comercializan en farmacias, normalmente en forma de colutorios o dentífricos, esa cantidad es mucho menor que la que utilizamos los profesionales en las clínicas dentales. Esto significa que su efectividad es menor, aunque sí pueden ser una ayuda para prolongar los efectos de un blanqueamiento dental realizado en una clínica; siempre eso sí, han de contar con supervisión del especialista.
Evitar riesgos con el blanqueamiento dental en clínica
El principal peligro lo representan productos que se comercializan vía Internet y que tienen elevadas concentraciones de peróxido. Según la legislación española, productos con cierta cantidad de esta sustancia solo se pueden vender a profesionales y aplicarse bajo su supervisión.
¿Qué puede ocurrir si no se hace así? El peróxido es un agente que lo que hace es “quemar” los pigmentos de los dientes. Si se aplica sin las precauciones imprescindibles o en cantidad inadecuada, se pueden producir quemaduras y causar graves daños en las piezas dentales.
Por eso, el consejo es acudir siempre a un especialista en blanqueamiento dental. Evidentemente, el tratamiento puede ser algo más costoso, pero hay mucho que ganar: resultados óptimos en tu sonrisa, seguimiento de los resultados y seguridad.
¿Cómo es el blanqueamiento dental en clínica?
Hay diferentes tratamientos y algunos se realizan en parte en casa, de modo que es muy fácil adaptarse a las necesidades de cada paciente. Lo más importante es que, antes de comenzar el tratamiento, el dentista va a hacer un estudio para determinar el estado de salud de la boca y ver si hay problemas como caries, enfermedad de las encías o cualquier otro que pueda comprometer el resultado final o desaconsejar el blanqueamiento.
Tras ello, solo hay que decidir el tratamiento:
- Con luz fría: se hace en la clínica y gracias a una lámpara profesional se activan los agentes del peróxido de manera más rápida, por lo que en una sesión se pueden ver resultados.
- Con gel: es un tratamiento que se hace en casa bajo las indicaciones del especialista. Consiste en aplicarse un producto específico dentro de unas férulas que se tienen que llevar unos minutos al día.
- Mixto: combina los tratamientos anteriores, por lo que los resultados son muy eficaces.
- Tiras blanqueantes: una opción sencilla para realizar en casa.
Es muy importante ser consciente de que, aunque se puedan conseguir por Internet productos similares a, por ejemplo, los que se usan con férulas, un tratamiento de este tipo solo lo puede aplicar con absoluta seguridad un dentista. Es la única forma de obtener buenos resultados y evitar efectos secundarios graves.
En resumen, el blanqueamiento dental en clínica es seguro, es cómodo y es rápido. En nuestra clínica dental en Xàtiva somos especialistas en las técnicas más innovadoras. Si quieres dar brillo a tu sonrisa, como ya han hecho muchos de nuestros pacientes, pide cita sin compromiso en Clínica Dental Carralero.
