La sonrisa es uno de los rasgos que más definen a la persona. Conseguir que sea perfecta es hoy en día muy sencillo gracias a los tratamientos de ortodoncia, pero muchos pacientes son reacios por una cuestión estética.
Sin embargo, los brackets tradicionales tienen una alternativa tan discreta que es casi invisible: la ortodoncia lingual Incognito™. Se trata de la solución ideal si eres de esas personas que desean conseguir una sonrisa bonita, pero no quieren que se vea ningún aparato.
Al ir situada en la cara interior de los dientes, la ortodoncia lingual es imperceptible, podrás hablar o sonreír abiertamente y nadie se dará cuenta de que llevas brackets. Tampoco los notarás tú, ya que su diseño ergonómico y su bajo perfil permiten mayor espacio para la lengua, de modo que resultan muy cómodos de llevar.
Todo ello es posible gracias a que cada uno de los brackets se diseña y se fabrica a medida de la pieza dental en la que se va a colocar. Para ello, se emplea un sofisticado sistema informático, tecnología 3D y robótica.
Y a todo lo anterior hay que unir que los brackets linguales Incognito™ están fabricados con una aleación de oro, por lo que no causan reacciones en personas con sensibilidad a los metales.
Cada caso es diferente y su complejidad también lo será, de modo que la duración del tratamiento puede variar sensiblemente de unos pacientes a otros. En cualquier caso, el ortodoncista puede hacer una estimación aproximada, que suele situarse entre los 18 y los 24 meses.
Una vez retirados los brackets linguales, sin embargo, es importante seguir unas pautas para evitar que el resultado se vea comprometido. Estas pautas, básicamente, consisten en llevar unos retenedores removibles el tiempo que el especialista marque.
Estética
La ortodoncia lingual Incognito™ es invisible ni siquiera a una corta distancia se pueden apreciar los brackets linguales. Por ello, está especialmente indicada para pacientes que deben cuidar su apariencia hasta el extremo.
Comodidad
Aunque el periodo de adaptación sea algo más prolongado que en el caso de brackets tradicionales, una vez que el paciente se acostumbra, apenas nota molestias. La ortodoncia lingual no impide hablar o comer con normalidad, aunque sí exige una higiene más rigurosa.
Precisión
Tanto los brackets linguales como los arcos se diseñan a medida de cada paciente y su forma es anatómica. De esta manera, se favorecen micro movimientos muy precisos, eficaces y perfectamente controlados.
Seguridad
Al ir colocados en la cara interna de los dientes, los brackets no provocan daños en el interior del labio en caso de un golpe involuntario. Además de ello, no dañan el esmalte dental y, al ser ultrafinos, la posibilidad de aparición de rozaduras o pequeñas úlceras se reduce.
Para todos
La ortodoncia lingual está indicada para todo tipo de pacientes, independientemente su edad y del problema que presenten. Permite corregir cualquier problema de oclusión, alineación o nivelación dental.
Comprueba cómo se verá tu sonrisa (Valorado en 40€)
Incluye radiografía panorámica y perfil (valorado en 80 €)
(valorado en 468 €)
"*" señala los campos obligatorios
